Cómo prevenir y curar la leishmaniosis en tu perro

Cómo prevenir y curar la leishmaniosis en tu perro

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 18 noviembre, 2017

La leishmaniosis es una enfermedad causada por un parásito llamado Leishmania y que es transmitido por la picadura de un mosquito. Este parásito puede traer serios problemas a tu mascota e incluso provocarle la muerte si no se trata a tiempo. Por ello vamos a hablarte de esta enfermedad y a darte algunos consejos para prevenirla o curarla en caso de que tu can ya la tenga.

Dependiendo de la zona en la que viva el perro habrá más posibilidades de que pueda contraer o no esta enfermedad. En los lugares tropicales donde prolifera la humedad y el calor, el can estará mas expuesto a este mosquito.

Pero independientemente de la zona, si el perro vive en el jardín o en una terraza, es deir, al aire libre, el riesgo de contagio es mayor. 

Síntomas de la leishmaniosis en los perros

Para saber cómo combatir la leishmaniosis es importante saber cuáles son los síntomas que presentará nuestra mascota.

Por supuesto, está de más decir que si notas alguno o algunos de ellos en tu perro, debes ir al veterinario rápidamente. Estos son:

perro enfermo
  • Úlceras en los bordes de las orejas, la cabeza o extremidades
  • Inflamación de los ojos. Crecimiento anormal de las uñas
  • Pérdida de pelo en la cabeza
  • Heridas que no cicatrizan
  • Orina con sangre
  • Diarrea
  • Conjuntivitis en los ojos
  • Dermatitis en la piel
  • Atrofia muscular especialmente en la cara, lo que crea una expresión triste y envejecida
  • Cansancio extremo
  • Inflamación de las articulaciones o cojera
  • Hinchazón de los ganglios linfáticos
  • Debilidad
  • Pérdida de peso
  • Fiebre
  • Hemorragia nasal
  • Inflamación del abdomen

En caso de que lleves a tu perro al veterinario y le haga las pruebas para la leishmaniosis y salgan positivas, si no está en un nivel alto y extendida en exceso, el can podrá llevar una vida normal, pero tendrá que tener reconocimientos periódicos y tomar medicamentos de por vida.

Como ves, la leishmaniosis no es un asunto a tomar a la ligera, por lo que la prevención es el mejor ataque contra ella.

Cómo prevenir la leishmaniosis

Existe una vacuna para esta enfermedad que es recomendable sobre todo para perros que viven en zonas tropicales o a la intemperie. Se debe administrar en los cachorros una vez pasados los 6 meses de vida y se hará 3 veces el primer año que se vacunen y 1 vez anualmente el resto de su vida.

Puede parecer un poco pesado, pero es una prevención estupenda teniendo en cuenta que la leishmaniosis puede matar a tu querido amigo peludo. Otras cosas que puedes hacer de forma sencilla son:

  • Ponerle un collar antiparasitario
  • Fumigar alrededor de la casa, especialmente donde se sabe que hay más mosquitos
  • Poner repelentes externos de vez en cuando sobre el pelo del animal
  • Si el perro vive dentro de la casa, poner antimosquitos eléctricos que son muy efectivos
  • No llevar al perro a zonas donde el agua está estancada y sucia
  • Pon mosquiteras en casa
  • Si puedes, permite que tu mascota duerma en casa, ya que de noche es cuando los mosquitos más trabajan.

¿Y si tu perro ya tiene leishmaniosis? ¿Hay solución?

Cómo curar la leishmaniosis

El veterinario puede proporcionarte un tratamiento que ayudará a que tu perro tenga una vida normal. Nunca desaparecerá del todo, a no ser que la enfermedad esté en un nivel muy leve, pero sí puede alargar la vida de tu mascota bastante tiempo. Eso sí, el tratamiento es costoso y no garantiza que el animal no pueda tener recaídas.

perro enfermo

No obstante, las secuelas que deja la enfermedad pueden ser letales, pues incluso puede provocar la muerte del animal, por lo que aplicar el tratamiento correcto a tiempo es vital para salvar la vida de tu mascota.

No olvides llevar a tu perro al veterinario para que él determine la gravedad de la leishmaniosis en el caso particular de tu mascota y pueda aplicar el mejor tratamiento con la mayor prontitud posible.

Y si tu perro aún no la tiene, vacúnalo. Ya lo dice el refrán: “Más vale prevenir que curar”.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.