¿Por qué algunos elefantes tienen colmillos y otros no?

Los elefantes son asesinados diariamente por sus colmillos de marfil. Esta explotación tiene una historia que viene heredada desde hace muchos siglos y aún sigue sin detenerse.
¿Por qué algunos elefantes tienen colmillos y otros no?
Samuel Sanchez

Revisado y aprobado por el biólogo Samuel Sanchez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 30 junio, 2021

Los elefantes son los mamíferos terrestres más grandes del planeta. Estos paquidermos pueden vivir hasta 70 años y algunas especies llegan a pesar 6000 kilos. De todas formas, se ha registrado que algunos elefantes tienen colmillos y otros no, pues estas piezas portan un gran historia de caza furtiva detrás de ellas. 

La explicación que dan algunos expertos a la pregunta de por qué algunos elefantes tienen colmillos y otros no —especialmente las hembras— es la avaricia humana y la caza furtiva, ya que sus colmillos de marfil atraen a los cazadores ilegales, lo cual ha tenido muchas consecuencias para la especie. Si quieres saber más sobre este tema, sigue leyendo.

¿Por qué algunos elefantes tienen colmillos y otros no?

En el Parque Nacional Gorongosa, en Mozambique —país situado al sur de África—, se encuentran varios elefantes viejos que llevan las marcas de la guerra civil que vivió este país por 15 años, entre 1977 y 1992. Es por esto que muchos de ellos no tienen colmillos.

Este conflicto mató alrededor del 90 % de los elefantes, sacrificados por el marfil de sus colmillos y por su carne. Este material fue la principal fuente de financiación en el conflicto y, después de la guerra, quedaron menos de 100 elefantes vivos en la zona. 

Organizaciones como Elephant Voices estudiaron los pocos supervivientes de esta guerra, de los cuales la mayoría eran hembras sin colmillos. Gracias a una mutación en el gen que da lugar a estas estructuras de marfil, estas hembras pudieron sobrevivir, afirman los expertos de WWF

Debido a que la mutación es heredable, sus crías han nacido predispuestas a no desarrollar colmillos. Esta no es una adaptación que responde a la amenaza de los humanos per se, pero sí favorece a los elefantes que nacen sin colmillos, pues aquellos que los portan siguen siendo cazados ilegalmente por su marfil en el resto del mundo. 

¿Por qué algunos elefantes tienen colmillos y otros no?

La misma historia, pero en otros lugares

Mozambique no es el único lugar en que la ausencia de colmillos está presente en los elefantes. También existen otros países con una gran historia de caza detrás. En Sudáfrica, por ejemplo, el 98 % de las 174 hembras en el Parque Nacional Addo Elephant no desarrollaron colmillos a partir de los años 2000. 

Otro lugar en el que se puede observar esto es en el Parque Nacional Ruaha, al Sur de Tanzania, un área saqueada por furtivos en los años setenta y ochenta. Allí, el 21 % de las hembras mayores de 5 años no tienen colmillos. 

Al igual que en Gorgosa, en Ruaha los porcentajes son más altos entre las hembras mayores. Alrededor del 35 % de las hembras por encima de los 25 años no tienen colmillos y, entre los elefantes de 5 a 25 años, el 13 % de las hembras no cuentan con ellos. 

La falta de estos ocurre desproporcionadamente entre las hembras, pues los machos sin colmillos son muy raros en los elefantes africanos. La experta en comportamiento de elefantes, Joyce Poole, cuenta que solo ha visto 3 o 4 machos sin colmillos en toda su vida.

Independientemente de elefantes machos o hembras, los humanos estamos dejando una marca en los mamíferos terrestres más grandes de la Tierra. Por si fuera poco, áreas de Asia que han presenciado caza de marfil —al igual que África— cuentan con niveles muy altos de elefantes sin colmillos. 

Algunos elefantes tiene colmillos, pero más pequeños

En el sur de Kenia, la caza ilegal ha reducido el tamaño de los colmillos en elefantes, como también en otros lugares. Se ha comprobado que los colmillos raptados entre 2005 y 2013 son más pequeños que aquellos de los elefantes sacrificados entre 1966 y 1968. Su tamaño se redujo al rededor de una quinta parte en los machos y más de un tercio en las hembras.

¿Y para qué tienen los elefantes colmillos?

Normalmente, los elefantes tienen colmillos porque estos les permiten hacer la mayoría de sus tareas diarias, como cavar en busca de agua o minerales, descortezar árboles para encontrar alimentos fibrosos, ayudar a los machos a competir por las hembras, defenderse, levantar y mover objetos y proteger su trompa.

Los colmillos de los elefantes son dientes que se extienden más allá de su boca. Están conectados al cráneo y cuentan con terminaciones nerviosas, al igual que los dientes humanos. Si el colmillo se rompe, se quita o se daña, no vuelve a crecer. 

A pesar de la pérdida de estos, los elefantes han podido sobrevivir y parecen estar sanos. Sin embargo, se cree que esta desventaja puede estar influyendo en el comportamiento de los elefantes y sus comunidades. Además, el trabajo que hacen con sus colmillos es vital para otras especies, por lo que su ausencia trae también implicaciones para el ecosistema que los rodea. 

Los árboles que los elefantes derriban o los hoyos que cavan para encontrar agua son muy importantes para las especies que dependen de estas acciones. Como se puede ver, sus colmillos no solo les sirven a ellos, sino que también ayudan a crear hábitats.

Por ejemplo, ciertos lagartos prefieren hacer sus hogares en árboles derribados o intervenidos por los elefantes. 

El comercio de marfil

El comercio de marfil es un negocio —mayormente ilegal— de los colmillos de marfil de algunas especies como el hipopótamo común (Hippopotamus amphibius), la morsa (Odobenus rosmarus), el narval (Monodon monoceros), el extinto mamut (Mammuthus spp.), el elefante africano o de sabana (Loxodonta spp.) y el elefante asiático (Elephas maximus). 

El marfil ha sido comercializado durante muchos años en regiones como Groenlandia, Alaska y Siberia y ha llevado a poner en peligro a las especies que poseen el marfil, afirman estudios de la Universidad Autónoma de Barcelona

En este caso, el marfil del elefante se ha exportado de África y Asia desde hace siglos, pues hay registros desde el siglo XIV a.C. Durante la colonización de África, este material fue exportado para fabricar teclas de piano, bolas de billar, joyas y otros objetos de riqueza exótica, pero de un origen tortuoso y sangriento. 

En 1979, en África existían aproximadamente 1,3 millones de elefantes, pero en 1989 se contaban solo 600 000. Todo esto fue obra del comercio de marfil internacional. En esta década, fueron asesinados alrededor de 75 000 elefantes al año, por el valor de unos 1000 millones de dólares. 

Un problema actual

Algunos elefantes tiene colmillos y todos aquellos que los posean, tanto hembras como machos, son objetivo de caza ilegal. Esto perjudica sus poblaciones, pues se quedan prácticamente sin machos para criar, debido a que los colmillos más codiciados son los de los machos mayores, por ser más pesados. 

Además, la sociedad de los elefantes depende de las hembras y los cazadores matan manadas enteras de estas, dejando huérfanas a las crías, que mueren sin llegar a reproducirse. Otra consecuencia que amenaza la especie. 

La caza por el tráfico de marfil sigue siendo la amenaza más grande para los elefantes con colmillos. La pérdida del hábitat y el conflicto que se genera entre humanos y elefantes es otra de las amenazas que sufren estos animales. 

Según WWF,  aproximadamente 100 elefantes africanos mueren diariamente por sus colmillos de marfil, su carne y otras partes de su cuerpo. A día de hoy, en África existen 110 000 elefantes menos que en la década pasada, en la que se contaban alrededor de 415 000.

Un elefante muerto sobre el barro.

Debido a esto, en África hay áreas protegidas establecidas para conservar los elefantes. En varios lugares —como Mozambique— se trabaja para reducir los conflictos que existen entre humanos y estos paquidermos, para acabar con la caza furtiva y otros daños para las especies. 


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