Perrito valiente con 3 extremidades, salva a su dueño después de que una ola lo arroyara
Este artículo ha sido revisado en profundidad para garantizar que la información presentada sea lo más precisa posible, cumpla con nuestros estándares de calidad y presente datos respaldados por fuentes confiables, reflejadas en la bibliografía y los enlaces dentro del texto.
Los perritos no solo tienen un gran instinto protector, sino que poseen una lealtad inmejorable. Por lo tanto, siempre ponen esas virtudes a disposición de sus seres amados para asegurar su bienestar.
Lo mejor de todo es que esas cualidades no se les debilitan aunque tengan una discapacidad. Como resultado de ello, a pesar de las adversidades, siempre encuentran la forma de ayudar a sus dueños cada vez que lo necesitan.
Tal como lo demostró un perrito que solo tenía 3 extremidades, pero hizo todo posible para salvar la vida de su mejor amigo humano que se encontraba viviendo una situación realmente crítica. En este artículo te compartimos todos los detalles acerca de esta historia.
Te puede interesar Cómo un perro le salvó la vida a su dueño con obesidad
El vínculo entre el perrito que tiene 3 extremidades y su familia
Tater Tot, un perrito de 15 de edad, perdió una de sus extremidades a causa de un cáncer. No obstante, esa dificultad no le quitó su energía ni las ganas de siempre querer estar junto a sus seres más queridos.
Debido a ello, desde que sufrió ese percance ha podido seguirse desplazando por su propia cuenta. Además, le ha dejado muy claro a sus dueños que su intención es seguirlos acompañando en cada uno de los planes que tienen mente.
Pues, su gran misión es asegurarse de que ellos siempre estén bien y hacerles sentir que tienen una compañía incondicional sin importar que las circunstancias sean críticas.
El momento en el que el perrito de 3 extremidades salvó a su dueño
Los familiares humanos siempre quieren que sus perritos estén felices y llenos de bienestar. Por lo tanto, el dueño de Tarot ha respetado su voluntad y sigue yendo con él a todas partes.
De esa manera, juntos emprendieron un viaje en bote por el río Allegheny, en Estados Unidos. Sin embargo, durante el recorrido la marea subió, unas olas golpearon de manera agresiva el transporte en el que iban y el dueño de 76 años de edad cayó al agua.
A raíz de esa angustiosa situación, al perrito no le importó su discapacidad y se lanzó de inmediato a la fuente hídrica para tratar de socorrer a su ser amado. Fue así como comenzó a nadar con la intención de alcanzarlo y poderlo sacar.
En ese momento, una mujer llamada Mary Jo, la cual también se encontraba navegando en compañía de su esposo, vio que el perrito se encontraba en el agua y de inmediato supo que algo grave estaba ocurriendo. Por esa razón, acercó su bote hasta la zona en la que estaba el canino.
De ese modo, al estar muy cerca, se dio cuenta de que lo que ocurría era que el dueño del perrito se encontraba debajo del agua. En vista de ello, reaccionó de inmediato y junto a unos pescadores lograron volver a poner al hombre en suelo firme.
Además, debido a que la mujer era enfermera cardíaca, pudo brindarle al señor primeros auxilios. Sin embargo, su estado era muy crítico y tuvieron que llegar unos médicos con urgencia.
Los esfuerzos médicos adicionales para proteger la vida del señor
El equipo médico notificado de este caso, sabía que el hombre no había podido reaccionar. Debido a esa situación, llegaron muy pronto al lugar de los hechos con un desfibrilador y lograron que su ritmo cardíaco se volviera a activar.
Después, lo llevaron a una clínica en donde le pudieron realizar todos los tratamientos correspondientes y tomaron todas las precauciones para evitar que tuviera una recaída. A causa de ello, con el paso de los días logró despertar y recuperarse del todo.
En ese instante, manifestó que no podía recordar todo lo que le había sucedido. No obstante, expresó que lo que sí tenía claro era que su valiente perrito de 3 extremidades y una rescatista se habían esforzado por ayudarlo.
Así que, les agradeció inmensamente por salvarle la vida. Además, manifestó que se sentía afortunado de poder compartir la vida con una mascota tan amorosa e incondicional.
Reflexión final
Esta conmovedora historia sigue demostrando que los perritos son una bendición en la vida de los humanos. Pues, además de alegrarles los días, están dispuestos a entregar su vida para protegerlos y cuidar su bienestar.
Por eso, es imprescindible que las personas los valoren, les brinden un trato recíproco y también los hagan sentir llenos de los mejores cariños hasta el último momento.