'Peluda' indigestión: cómo lidiar con ese problema

'Peluda' indigestión: cómo lidiar con ese problema

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 16 noviembre, 2017

Los gatos son animales muy higiénicos que pasan buena parte del día acicalándose. Por eso, aunque no se los bañe, se los suele ver bonitos e inmaculados. Pero como nada es perfecto en esta vida, tanta limpieza felina tiene sus consecuencias. Se trata de las famosas bolas de pelo que se forman en su aparato digestivo y pueden provocar indigestión.

¿Por qué se forman las bolas de pelo?

lenguaje de los gatos

Los gatos utilizan sobre todo su lengua para acicalarse. Esta resulta un instrumento ideal, ya que cuenta con unas pequeñas espinas en su superficie que le permiten arrastrar todo el pelo muerto.

El problema reside en que los mininos no pueden deshacerse del pelo que queda en su boca y terminan tragándolo. Y si bien muchos de estos pelos son eliminados normalmente a través de las heces, otros se van acumulando en su aparato digestivo, formando las consabidas bolas, que el animal buscará eliminar a través del vómito.

Si no consigue expulsar estas formaciones a través de su boca, es probable que, en casos graves, terminen obstruyendo sus intestinos, siendo necesario una intervención quirúrgica para eliminarlas por la indigestión.

Las bolas de pelo de los gatos son una consecuencia directa de sus largas sesiones de acicalamiento. Los pelos que el animal se traga y no elimina normalmente a través de las heces son expulsados con el vómito.

¿Cómo son las bolas de pelo que vomitan los gatos?

Quienes tienen gatos seguramente se habrán hecho la misma pregunta la primera vez que vieron a su minino expulsar los pelos que se atiborraron en su estómago: ¿Pero por qué las llaman bolas?

Es que, en realidad, las llamadas bolas de pelo tienen una forma alargada de color más o menos parecido al pelaje del minino y de tamaño variable, por lo general de entre tres y cuatro centímetros. En ella se entremezclan pelos, restos de alimentos y saliva.

Cuando el animalito está tratando de vomitar para eliminar una de estas bolas, emite sonidos similares a la tos humana. Normalmente un gato expulsa una o dos bolas de pelo a la semana.

¿Cómo facilitar la expulsión de las bolas de pelo de los mininos y evitar la indigestión?

Lo más habitual es que un minino busque “purgarse” comiendo hierbas y así provocar el vómito para expulsar las bolas de pelo. Así que si tienes un jardín o patio no lo reprimas si se abalanza sobre el césped u alguna planta. Toma, eso sí, algunas precauciones:

  • No utilices pesticidas u otras sustancias químicas que puedan dañarlo.
  • Consulta al veterinario sobre las plantas que pueden resultar peligrosas para el minino.
  • Para evitar que destruya tu jardín, cultiva también  las hierbas más adecuadas para que consuma tu mascota. Pídele consejo, una vez más, al veterinario.

Si vives en un apartamento y tu gato no tiene acceso al exterior, lo ideal sería que hagas crecer en algunas macetas sus plantitas preferidas. O que las compres en las tiendas de mascotas y se las ofrezcas regularmente.

Cepillar a tu minino es una buena estrategia para que no trague tanto pelo

Otra tema fundamental para contribuir a que no se acumule pelo en el  aparato digestivo del minino es que lo cepilles con frecuencia.

Si bien es cierto que cuanto más largo sea el pelaje de tu mascota más bolas de pelo se generarán, los mininos de pelaje corto no están exentos de este inconveniente.

Así que, una vez más, acude al veterinario para que te indique cuál es el cepillo más adecuado para tu gato.

En épocas de muda de pelo, lo conveniente es que cepilles diariamente a tu amigo felino. Si lo haces con cariño y esmero, seguramente adorará las sesiones de peinado ya que, además, lo relajarán.

Más consejos para combatir las bolas de pelo y la indigestión

gato comiendo

Otras medidas que puedes tomar para prevenir la formación excesiva de bolas de pelo son:

  • Dale a tu gato una dieta rica en fibra. Puedes incorporarla de forma natural o comprarle un pienso formulado para prevenir su formación. En cualquiera de los casos, pide consejo profesional.
  • Evítale el estrés. Recuerda que un gato ansioso seguramente incrementará sus sesiones de acicalamiento y, en consecuencia, ingerirá más pelo.
  • Presta atención a que no se trague ningún objeto pequeño, tela o hilo que encuentre por la casa y que contribuya a generar una obstrucción.

 


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.