Iban a eutanasiar a perrita cuando ya no pudo tener más crías, la rescataron de la muerte
Unas personas crueles iban a eutanasiar a una perrita husky porque ya no podía tener más bebés después de enfermarse. Ella era víctima de la cría ilegal de animales de compañía y por muchos años fue explotada con este fin.
Sin embargo, y pese a que los responsables estaban decididos a ponerla a dormir, su destino no se sellaba ahí. Una mujer de buen corazón le ayudó a salir adelante de sus problemas de salud y cambió su vida por completo. ¡Esta es una historia con final feliz!
¿Por qué iba a eutanasiar a la perrita?
El motivo detrás del por qué quería eutanasiar a la perrita Maya es cruel, estaba enferma y no podía dar a luz a más crías. Ella es de raza husky siberiano y era utilizada como incubadora, no se sabe cuántos bebés para la venta ilegal tuvo.
Tenerla solo con fines reproductivos deterioró su salud y con los años empezó a enfermarse. La explotación se sumaba a que no tenía atención veterinaria, no la alimentaban como era debido y mucho menos le daban espacio para ejercitarse como este tipo de razas lo demandan.
Cuando los responsables de su cuidado se dieron cuenta de que estaba muy débil, vieja y enferma para seguir siendo madre, vieron en riesgo sus ingresos y prefirieron dormirla.
Cuando no había esperanza, un ángel apareció en su camino
Silvia Rayssa es la mujer que le salvó la vida a la perrita que iban a eutanasiar. Según comentó a un medio que cubrió el evento, ella la vio luchando por su vida en condiciones deplorables, se alimentaba de sus propios desechos.
Cuando la mujer la rescató, la llevó inmediatamente al veterinario, sabía que estaba muriendo. Allí descubrieron que estaba desnutrida y muy enferma, pero notaron que Maya estaba dando todo de sí para mejorar. Gracias a un trabajo conjunto, la canina logró recuperarse, pero no del todo bien.
Resulta que por el tiempo que pasó encadenada y pariendo una y otra vez, sus patas traseras estaban dañadas y no había nada que hacer, no podría volver a caminar con normalidad. Sin embargo, esto era mínimo porque lo importante era sanar su corazón y ayudarla a olvidar su pasado.
Poco a poco y con todo el amor que le brindaron su nueva madre adoptiva y el personal médico, subió de peso y sanó las heridas de la piel. Rápidamente, estuvo lista para usar una silla de ruedas con la que pudo volver a correr libre y segura.
Maya pasó de estar a punto de ser eutanasiada a ser feliz
Maya tenía muchas ganas de vivir y Silvia de que ella lograra salir adelante, eran la dupla perfecta. Aunque no fue fácil, la perrita logró aprender a utilizar su silla de ruedas y así volver a caminar y correr.
Al identificar que su historia era cruel, pero inspiradora, la tutora de la perrita abrió unas redes sociales a su nombre @maya_especial y compartió su historia para crear conciencia. En la actualidad, tiene 11 000 seguidores, quienes siguen de cerca sus avances y en donde le dejan mensajes de aliento.
Si tienes pensado comprar una mascota, primero recuerda que hay miles en situación de abandono esperando por una segunda oportunidad. Si la compra es inminente, al menos asegúrate de hacerlo en un lugar legal y en donde traten con amor a los padres del que será tu nuevo compañero de vida.