Cómo evitar que el perro pida comida todo el tiempo

Cómo evitar que el perro pida comida todo el tiempo

Escrito por Yamila

Última actualización: 27 noviembre, 2017

Es algo realmente insoportable estar sentados a la mesa y que el perro pida comida como un desesperado. Algunos, incluso se acaban de terminar su plato. Pero igualmente hacen lo posible para que tengamos lástima por ello y les demos un poco de lo que estamos consumiendo. En este artículo te contamos cómo hacer para que tu mascota esté lejos de ti cuando comes.

¿Es normal que el perro pida comida siempre?

Aunque sea un hábito que nos moleste y que deseemos erradicar en el peludo, lo cierto es que no podemos culparle por ello. Es básicamente una cuestión de instinto que, si bien puede ser “escondida” con el entrenamiento, en algún momento puede salir a la luz de nuevo.

Piensa en tu reacción cuando en casa están preparando una rica comida… ¿Qué haces? ¡Ir a la cocina! En el caso de los perros sucede lo mismo: quieren ver qué está disfrutando su dueño y, sobre todo, quieren probar un poco de ese delicioso manjar… ¡Incluso si no es apto para ellos!

Quizás a ti no te moleste tanto que tu perro pida comida apenas te sientas a cenar. Sin embargo, el problema comienza si, por ejemplo, tienes invitados en casa y también a ellos les ponen su mejor cara de “gato de Shrek” para conseguir un trocito de pollo, un hueso o una rebanada de pan.

Los perros “tragones” son expertos en todo tipo de monerías para obtener lo que quieren. Y si en casa hay niños, ellos serán los principales cómplices, dándoles algo de su plato por debajo de la mesa.

Un buen entrenamiento temprano puede ayudar a que el perro no pida comida todo el tiempo.

Cómo prevenir la mendicidad del perro

Ellos saben cómo hacernos flaquear y aceptar su chantaje. Ponen carita triste, lloran… A veces, incluso nos llaman la atención con sus patitas. Pero debemos resistirnos a la tentación de darles comida, porque eso fomenta su pedida.

Si bien lo mejor sería enseñarles desde cachorros a que no pidan comer de nuestro plato, muchas veces este hábito lo adquieren a los pocos años de vida. Para que no te sientas el dueño más malo del mundo por no compartir tus alimentos con tu mascota, presta atención a estos consejos:

1. Aleja al perro de la mesa

Cuando apoye las patas delanteras en la mesa, tendrás que quitarlo de allí con un simple movimiento del brazo. Esto te llevará varias veces y varios días. Tras una semana o dos, el perro entenderá que es algo prohibido. Acompaña ese quite con un “no” efusivo y directo.

2. Ponle una barrera

Si eso no funciona, tendrás que colocar una especie de barricada o barrera para que no llegue a la mesa o a su alrededor. Por ejemplo, cerrar la puerta de la cocina, poner esas puertas para bebés, o hasta dejarle en la terraza o patio. Quizás te pueda parecer un poco brusco o desalmado, pero así te evitarás la molestia del animal pidiendo comida todo el tiempo.

3. Darle de comer antes o durante

Muchos perros se terminan su plato en un par de segundos, pero hay otros que tal vez necesitan unos minutos para tragar todo. Una buena idea es servirle el pienso justo en el mismo momento en que ponemos nuestra comida en la mesa. Así tendremos algunos minutos de tranquilidad. Otra opción es aprovechar que nos pide alimento para ir hasta su comedero y llenarle el plato. Así, el animal entenderá las diferencias entre los menúes perrunos y humanos.

4. Mantén ocupado al animal mientras el perro pida comida

Puedes darle un juguete, por ejemplo, o de esos huesos para masticar, así está entretenido mientras comes. Si tienes más de un perro, este sería un momento ideal para que salgan a jugar al patio, terraza o balcón.

5. Átalo cerca de ti

Esta opción puede ser algo drástica, ya que podría ladrar o llorar con más efusividad, pero en algunos casos funciona. Ponle la correa y átalo a unos metros de la mesa. Al lado coloca su cama para que esté cómodo, así como también su comedero y su bebedero.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.