Entender la mente de tu perro

Entender la mente de tu perro

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 18 noviembre, 2017

Cuando un perro llega por primera vez a nuestro hogar, se nos puede hacer difícil entender cómo tratarlos, cómo mostrarles cariño o aún más, aprender sus expresiones de cariño y su forma de pedirnos algo. Para lograr comprender todo esto y conocer más a nuestro nuevo amigo, es esencial entender la mente de tu perro.

Puede que te estés preguntando si es posible lograr entender la mente de tu perro. La respuesta es sí. Nuestra mente va movida por razonamientos, sentimientos y emociones y por ello es muy difícil lograr comprender por qué los canes lo hacen como lo hacen si no entendemos su mente.

Cómo entender la mente de tu perro

los perros odian los abrazos

Para entender la mente de tu perro debes observar cómo reacciona a tus movimientos, porque aunque hay muchas acciones que tienen en común todos los perros, también es cierto que cada can es un mundo. Por ello, aquí ta hablaremos de generalizaciones, pero en cada mascota puede haber algún tipo de variación.

Caricias

Para poder acariciar a tu perro de manera que sea agradable para él hay que entender la mente del animal, y como te dijimos antes, observar qué le gusta y qué no.

Por norma general, a ningún perro le gusta que le acaricien el rabo, las patas, las orejas, y, en algunos casos, incluso la cabeza.

A casi todos les encanta que les acariciemos el lomo, la espalda, debajo del cuello y la tripita. No obstante, a pesar de que esto es la generalización en todos los perros, observa al tuyo y si alguna de las caricias no le gusta, cámbiala.

Agresividad

En ocasiones muchos perros pueden ser agresivos, incluso en nuestra propia casa. Esto sucede porque a veces damos por sentado que los canes son animales y que no nos entienden, pero esto no es del todo cierto.

Los perros tienen la capacidad de observarnos y entender nuestro lenguaje corporal, así que saben reconocer nuestro tono de voz, nuestros gestos y nuestra postura. Así son capaces de identificar si estamos o no cómodos con su presencia.

Por ello, la agresividad que algunas veces demuestran los perros, en muchas ocasiones es causada por nuestra actitud.

Lo que debes saber para entender la mente de tu perro

Los perros son muy diferentes a los humanos y en ocasiones, ese es nuestro mayor error: olvidar ese concepto. Los canes se mueven por instinto, reaccionan según su lo que huelen y lo que son capaces de presentir.

Hay que entender que ellos se mueven según una estructura jerárquica y que por tanto siempre están buscando un líder. Si tú o algún miembro de tu familia no le demuestran quiénes son los líderes, él se tomará ese papel, lo cual puede crear en el animal episodios de agresividad o ansiedad.

Los dominantes son los que ganan siempre, por lo que debemos tener cuidado para no fomentar esa actitud. Por ejemplo, si el animal está tenso y nosotros lo acariciamos, estaremos reforzando ese comportamiento y será agresivo, si no con nosotros, con otras personas cuando vayan a tocarlo.

No obstante, por el contrario, si cuando tiene miedo lo acariciamos, le estamos diciendo que tener miedo está bien. Cuando el perro demuestra emociones, lo mejor es dejarlo tranquilo.

Otro error común que cometemos los humanos con nuestros perros es llamarle la atención por hacer cosas que son normales en ellos, como oler el suelo o comer cualquier cosa que se haya caído en él.

entrenar a tu mascota

Regañarle una y otra vez por algo que para ellos es natural no servirá de mucho, tan solo para que tu perro no entienda lo que le dices y tenga miedo cada vez que va a hacer algo. Es como si a ti te obligaran a no bostezar cuando tienes sueño.

Del mismo modo, los perros son animales de manada y están acostumbrados a relacionarse con otros canes, saben reconocer a sus congéneres. Pero cuando van hacia algún canino en nuestra presencia, siempre intentamos impedirlo e incluso lo regañamos.

Dejarlo socializar es algo natural para él y además será muy beneficioso para que llegue a ser una animal agradable con otros perros y otras personas.

Esfuérzate por entender la mente de tu perro y tu vínculo con él se estrechará enormemente.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.