El amor entre un dueño y su perro vs el de una madre y su hijo

Nunca antes nuestro vínculo con los perros fue tan especial como hasta este momento, son parte de nuestra familia. ¡Lo dice la ciencia!
El amor entre un dueño y su perro vs el de una madre y su hijo

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 15 septiembre, 2022

La relación entre un dueño y su perro no difiere mucho de la relación que existe entre madre-hijo. ¿Será esta la razón por la que hoy existen los llamados “perrhijos”?, aunque esto sería tema para otra ocasión, hoy nos enfocamos en este primer acercamiento.

Quédate, pues te explicamos las razones que da la ciencia sobre este vínculo tan especial.

La ciencia en el amor entre un dueño y su perro

Seguramente te has preguntado por qué nuestro perrito muere de emoción al vernos, por qué quiere estar sobre nosotros todo el tiempo y por qué se entristece tanto cuando estamos ausentes.

Pues bien, gracias al avance de la imagenología de los canes, un estudio de la Universidad de Emory ha podido escrutar los acontecimientos que ocurren en el cerebro de nuestros perros.

abrazo persona perro

Se ha descubierto que no solo nos ven como parte importante de su familia. Pues los centros de recompensa de los perros se ven estimulados, casi como pequeñas explosiones, cuando se les expone a olores pertenecientes a su dueño.

Lo más interesante es que entre la cantidad de estímulos que se les presentó, los canes daban siempre prioridad a los olores de sus dueños frente a todos los demás.

Otro estudio sobre la comunicación entre perros y humanos

La Universidad Eötvös Loránd de Budapest (Hungría) realizó otro estudio, esta vez centrado en la comunicación oral entre perros y humanos. La respuesta a esta investigación arrojó que los sonidos vocales con más carga emocional se procesan de manera muy similar en ambas partes, en la canina y en la humana.



Gracias a este mutuo entendimiento, nuestros canes son la única especie que, cuando se asustan, buscan consuelo, refugio y protección en sus dueños. Esto, tal como lo hacen también los niños con sus padres, en cuanto una situación les produce mucho miedo.

¿Sabías que los canes son la única especie animal (no primate) que hace contacto visual con los seres humanos para comunicarse?

¿Y qué hay del humano como dueño?

Al igual que se ha hecho una comparativa del perro en relación con el humano, también se han hecho estudios que evalúan al contrario. Es decir, al humano respecto al perro. En el Hospital General de Massachusetts (Estados Unidos) se midió la actividad cerebral humana en respuesta a imágenes de perros y niños.

Los voluntarios del estudio fueron mujeres que habían tenido perros y bebés durante, al menos, dos años de su vida. El resultado demostró que ambos tipos de imágenes se activaron en las regiones del cerebro asociadas con la emoción, la recompensa y la interacción social.

Así se pudo concluir que tanto un bebé como un cachorro, en la mayoría de los casos, nos hacen igualmente felices.

Un dueño y su perro, un amor inquebrantable.
Esta es la razón por la que solemos ver a nuestros perros como un integrante más de la familia y, gracias a la ciencia, se ha comprobado lo que ya muchos de nosotros sabíamos: que los perros también nos consideran parte de la suya, en un grado tan profundo como el de un niño.

Lo interesante de este estudio es lograr, al fin, evidenciar a través de la ciencia que el perro es un animal tremendamente excepcional. Esto refuerza, además, nuestro vínculo ancestral con ellos, la relación de miles de años de antigüedad que tenemos con estos animales y la capacidad de comunicación que hemos desarrollado con ellos.

La oxitocina en el amor entre humanos y peludos

perro con familia

Seguramente conocemos esta hormona conocida como “la hormona del amor”, segregada por nuestro organismo cuando sentimos afecto, cariño, emoción o amor por otro ser vivo.

Según los investigadores de la Universidad de Azabu, se verificó que entre un dueño y su perro se crea un vínculo muy fuerte. Tan estrecho como el que genera una madre con su hijo. Todo gracias a esta hormona tan especial.

Estos investigadores midieron la hormona a través del análisis de orina que realizaron a 30 perros, de distintas razas y edades, y a sus dueños. Por otro lado, encerraron en un cuarto a estos canes con sus dueños durante 30 minutos. Durante ese tiempo, observaron todas las interacciones que se llevaron a cabo entre ambos.

Así, descubrieron que los niveles de oxitocina del dueño y del perro aumentaban con tan solo mirarse. Y, cuanto más contacto visual había, mayor fue el aumento en los niveles de esta hormona en el cerebro de ambos. ¿Increíble cómo se ha desarrollado nuestro vínculo con ellos, no crees?

Sin duda, esta relación entre perros y humanos será para toda la vida, aunque claro, no son la única especie que se ha integrado a nuestra familia. Después de todo, terminamos siendo compañeros en este mismo hogar, nuestro planeta.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.