Conoce los parásitos más comunes en perros

Conoce los parásitos más comunes en perros

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 18 noviembre, 2017

Los parásitos son seres molestos que incomodan a nuestras mascotas y que además pueden transmitirles enfermedades, a ellos y a nosotros. Por ello es vital mantenerlos controlados, pero para hacerlo, primero hay que saber reconocerlos. Conocer los más comunes y cómo terminar con ellos es una buena labor.

Los parásitos más comunes en perros

Existen cientos y cientos de parásitos, pero hemos seleccionado los 4 más comunes y que consideramos también más peligrosos. Estos son ectoparásitos, es decir, contienen pequeños parásitos en su interior que pueden provocar enfermedades incluso mortales para tu animal.

La pulga

mastin rascandose

 

Este es sin duda uno de los parásitos más comunes en los perros. Todos sabemos el molesto picor que origina una simple pulga en nuestras mascotas y su velocidad para poner huevos ( 6000 huevos es su cantidad máxima) y en poco tiempo llenar la piel de tu can de ellas.

La pulga se alimenta de sangre caliente, no importa si humana o animal, lo cual demuestra que le gustan los lugares calentitos, por lo que será primordial mantener bien limpia la casa bajo y detrás de los muebles, las alfombras y cualquier rincón oscuro y caliente que se te ocurra.

Aunque nos parecen de lo más común y normal, las pulgas pueden transmitir enfermedades en los perros tales como  Bartonelosis o la Dipilidiasis.

La mejor forma de combatir las pulgas es poniendo un collar antipulgas a tu perro, manteniendo una limpieza profunda en el hogar y usando insecticidas destinados para ello. Además, también hay algunos remedios caseros.

Flebotomo

Este parásito es el causante de la Leishmaniosis, pues es el portador de la bacteria Leishmania causante de esta terrible enfermedad canina.

Esta enfermedad es incurable y el perro deberá estar medicado de por vida si ha tenido la suerte de no coger la afección en su forma grave y morir. La mejor manera de prevenir que este parásito entre en la vida de tu can es mediante antiparasitarios externos y también internos.

Garrapata

Es posible que creas que este es uno de los parásitos más sencillos y menos peligrosos que existen, Que es tan simple como encontrarlo en tu animal y arrancarlo, pero nada más fuera de la realidad.

Una sola garrapata puede matar a tu perro haciéndole contraer la Babesiosis, la Ehrlichiosis o la enfermedad de Lyme. Algunas de estas afecciones son mortales, por lo que lo mejor para prevenirlas es estar atento a tu animal y hacerle una revisión diaria, especialmente si no vive dentro de la casa, sino en un patio o jardín en el exterior.

Es importante que si encuentras uno de estos parásitos en tu perro no lo arranques de una vez. Ponte unos guantes para que no pueda infectarte y con unas pinzas de depilar, poniéndolas lo más cerca posible de la piel del animal, agarra bien y tira despacio asegurándote de que sale por completo.

Si esto no sucede así es probable que parte del parásito se quede dentro del animal y genere infecciones que pueden ir a mayores.

Mosquito

baño perros

Estamos hablando de esos pequeños voladores molestos que se alimentan de nuestra sangre, y que por desgracia, pueden crear grandes problemas de salud a nuestros canes.

Si a nuestro perro le pica un mosquito infectado con el parásito Dirofilaria puede contraer Filariosis, una afección pulmonar que puede provocar la muerte de tu mascota. Este parásito es conocido como el “gusano del corazón”, pues una vez dentro del cuerpo toma la forma de un gusano que se introduce hasta el corazón y los más importantes vasos sanguíneos, obstruyéndolos y pudiendo hacer morir al animal.

Lo mejor para evitar este tipo de parásitos que pueden matar a tu animal es hablar con tu veterinario a fin de que te aconseje la mejor forma de desparasitar continuamente a tu perro. Aunque lo normal es una vez cada seis meses, quizá tu veterinario tenga una sugerencia mejor que darte.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.