Cómo los supergusanos convierten la espuma de poliestireno en una comida saludable

Aunque los supergusanos son capaces de degradar la espuma de poliestireno, sufren serias afectaciones a su metabolismo y a su desarrollo. Por esta razón, no se cree que sea bueno utilizarlos de manera directa para degradar el plástico.
Cómo los supergusanos convierten la espuma de poliestireno en una comida saludable
Cesar Paul Gonzalez Gonzalez

Escrito y verificado por el biólogo Cesar Paul Gonzalez Gonzalez.

Última actualización: 14 julio, 2022

Uno de los más grandes problemas ecológicos en la actualidad es el uso de los plásticos y su degradación. En la naturaleza, estos objetos derivados del petróleo son procesados por muy pocos animales, lo que propicia una acumulación excesiva que nunca se podrá solventar. No obstante, hace poco se describieron algunos supergusanos que son capaces de transformar la espuma de poliestireno (un tipo de plástico) en alimento.

El poliestireno extruido o también llamado poliestireno en espuma, es uno de los plásticos más utilizados para envases de alimentos e incluso electrodomésticos. Por esta razón, es normal que sus residuos sean excesivos y peligrosos para el ambiente. Es por ello por lo que la existencia de supergusanos, que convierten la espuma de poliestireno en alimento, es tan importante. Conoce más sobre ellos en el siguiente espacio.

¿Por qué los plásticos son difíciles de degradar?

Los plásticos están formados por moléculas gigantes denominadas macromoléculas, las cuales se crean de manera artificial a partir de moléculas más pequeñas de carbono. A este proceso se le llama polimerización y ocasiona que posean una gran inercia química. Es decir, no son tan susceptibles a la oxidación, la humedad o al ataque de algunos productos químicos.

Esto significa que los microorganismos, como las bacterias, los hongos y los protozoarios, tengan muchas dificultades para transformar a los plásticos en materia orgánica. Por lo tanto, la descomposición natural, que debería durar solo algunos meses o un par de años, se alarga por varios cientos de años.

Gracias a sus características inertes, los plásticos se volvieron demasiado útiles para la vida humana, pues ayudan a proteger los alimentos de la degradación natural. No obstante, esta misma capacidad los vuelve un serio peligro para el ecosistema porque tardan entre 100 y 1000 años en desintegrarse.

Los supergusanos que comen poliestireno

Un estudio publicado en la revista Environmental Science & Technology, menciona que diferentes especies de gusanos de harina podían sobrevivir en un ambiente contaminado con poliestireno. Además, eran capaces de digerir grandes cantidades de este plástico y transformarlo en dióxido de carbono.

Estos pequeños gusanos son en realidad las larvas del escarabajo de harina (Tenebrio spp.), por lo que sorprendió demasiado que tuvieran tal habilidad. Por si fuera poco, podían sobrevivir con tan solo consumir el poliestireno sin ningún otro tipo de suplemento alimenticio.

En el 2022, un grupo de científicos de la Universidad de Queensland (Australia) se dio cuenta de que el gusano de harina no era el único que podía consumir poliestireno. Otra especie de coleóptero denominada Zophobas morio, también poseía dicha capacidad e incluso completó todo su ciclo de vida con solo este plástico como comida.

¿Por qué se les llama supergusanos?

Es importante remarcar que la degradación del poliestireno no conlleva su aprovechamiento como recurso alimenticio. Visto de otra forma, el simple hecho que los gusanos de harina sean capaces de desintegrar este plástico, no significa que obtengan nutrientes al consumirlo. Esto es lo que pasa con las larvas que pertenecen al género Tenebrio.

En el caso de Zophobas morio, los gusanos degradan la espuma de poliestireno y obtienen energía y nutrientes al hacerlo, lo que los convierte en supergusanos. Gracias a esta característica única, se abre la posibilidad de utilizarlos para reducir la contaminación por desechos plásticos.

¿Cómo logran degradar el poliestireno?

La capacidad que tienen los supergusanos de degradar el poliestireno es otorgada por los microorganismos que habitan sus intestinos. Estos pequeños seres destruyen las moléculas del plástico y liberan sus nutrientes. Sin ellos, los fragmentos del poliestireno pasarían por todo el sistema digestivo y saldrían sin ninguna modificación.

En el laboratorio, 100 supergusanos son capaces de degradar entre 34 y 39 miligramos de espuma de poliestireno por día. Cerca del 50 % del plástico se aprovechará como nutrientes, mientras que el restante será convertido en dióxido de carbono.

Supergusano Zophobas morio en fondo blanco

El último paso

Los microorganismos que habitan el intestino de los supergusanos son muy diversos y diferentes, pues cada uno apoya de manera distinta en la digestión. De entre todos ellos, solo unos pocos son los que realmente apoyan en destruir y aprovechar los componentes del plástico. Por esta razón, los científicos utilizaron técnicas de metagenómica para analizar la microbiota intestinal y encontrar a los culpables.

Aunque suena sencillo, el proceso es tardado y consiste en analizar una enorme cantidad de datos. Debido a ello, lo único que se logró fue identificar a los géneros de bacterias Pseudomonas, Rhodococcus y Corynebacterium como posibles responsables.

A pesar de que no se identificaron qué gen o genes estaban involucrados en la degradación del poliestireno, esta investigación es un claro avance en la lucha contra la contaminación del plástico. Es muy probable que el siguiente paso se enfoque en encontrar a las enzimas responsables de este fenómeno. Con esto sería suficiente para producirlas de manera sintética y en grandes cantidades sin depender del gusano.

Como te podrás dar cuenta, es posible que tengan que pasar varios años más antes de lograr solucionar el problema de la contaminación por el plástico. Sin embargo, los avances actuales son prometedores y existen altas expectativas al respecto. En este punto, solo queda esperar a que las investigaciones se realicen sin contratiempos y que la humanidad pronto goce de sus beneficios.


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