Una cámara captó a un gato en peligro de extinción en Rusia

Una cámara captó a un gato en peligro de extinción en Rusia

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 08 febrero, 2022

Una reciente expedición a la Reserva Natural de Altai, en el sur de Siberia, logró un notable hallazgo: con u na cámara captó a un gato de Pallas. Este felino, también conocido como manul, es un animal que no se deja ver mucho ante ojos humanos. Pero además, integra la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Allí, la especie tiene la clasificación de “casi amenazada”. Por eso es destacable el hecho de que un ejemplar haya podido ser fotografiado.

Conoce la historia detrás de la cámara que captó a un gato de Pallas

Por ser reacios a mostrarse ante las personas -tendrán sus buenos motivos- no son muchas las oportunidades de ver imágenes de estos felinos en su hábitat natural.

En esta oportunidad, el registro fue tomado durante una expedición organizada por el Fondo Mundial para la naturaleza (WWF), el Fondo Regional de Argalí para la protección animal y la Reserva Natural de Altai.

Así que, ya que se captó a un gato de Pallas, hecho para nada usual, aprovechad la oportunidad de admirar a este hermoso felino.

Algunos datos sobre el manul

Como podréis apreciar, estos animal es se ven bastante grandes y gorditos. Sin embargo, tienen el mismo tamaño y peso que un gato doméstico promedio. Pero su largo y denso pelaje, para poder soportar las bajas marcas térmicas de los lugares que habitan- los hacen ver de un tamaño mayor al que en realidad tienen.

Es que el manul cuenta con cerca de 9.000 pelos por centímetro cuadrado y que alcanzan una longitud de hasta 7 centímetros.

Los dominios de este mamífero carnívoro pertenecienten a la familia Felidae. Se extienden principalmente, además de la citada Siberia, a las estepas de M ongolia y el Tíbet. Se lo puede encontrar en alturas de hasta 5 mil metros sobre el nivel del mar.

Fue clasificado en 1776 por el zoológo alemán Peter Simón Pallas, que lo denominó Felis manul. Pero recientemente se descubrió que se encuentra dentro del género Otocolobus.

Una cámara logró captar imágenes del esquivo gato de Pallas en las estepas siberianas. También conocido como manul, este felino paticorto y macizo es perseguido por cazadores furtivos a causa de su grueso y hermoso pelaje.

Más información sobre el gato de Pallas

Entre otros características de estos he rmosos felinos, podemos señalar:

  • Patas y garras cortas.
  • Cuerpo rechoncho y macizo.
  • Cola con anillos negros, larga y peluda.
  • El color del pelaje va del gris ceniza al rojizo.
  • Ojos con pupilas redondeadas.
  • Orejas bajas y separadas.
  • Hocico de aspecto aplanado.

Además, son animales de hábitos solitarios, que suelen cazar en horas de poca luz. Su alimento principal lo constituyen los pequeños roedores y los pájaros. Y si bien transcurren buena parte de su día refugiados en grietas en las rocas, o en madrigueras, también se los ha sorprendido -como buenos mininos que son- tendidos al sol.

Una especie perseguida por cazadores furtivos

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Fuente: siberiantimes.com/home/

La hembra del manul pare entre 2 y 6 gatitos por camada tras un período de gestación de entre 66 y 75 días. Las crías pesan alrededor de 90 gramos y nacen cubiertas por un grueso pelaje. El tamaño de adulto lo alcanzan a los seis meses.

En cautiverio, se tiene registro de que los gatos de Pallas viven hasta 11 años. Sin embargo, si bien se logran reproducir en estas condiciones, las tasas de supervivencia son bajas a causa de las infecciones que sufren. El motivo parece estar en un sistema inmunológico poco desarrollado, ya que en su aislado hábitat natural no estarían expuestos a virus.

El manul, además, es una especie víctima de la caza furtiva. Son animales perseguidos por su pelaje. Pero, una vez más, a causa del comportamiento esquivo, no se tienen datos concretos sobre el tema. Y también es difícil de estimar el número exacto de estos felinos que habitan hoy el planeta.

Sin embargo, pudimos gozar de bellas imágenes gracias a la cámara que captó a un gato de Pallas, imponente en sus dominios. Y eso se agradece.

Fuente de las fotos: Siberian Times (iberiantimes.com/home/)

 


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