7 aspectos curiosos del abejaruco cabeciazul

El abejaruco cabeciazul espera sobre las ramas de los árboles para cazar a su siguiente presa. Vamos a conocerlo un poco mejor.
7 aspectos curiosos del abejaruco cabeciazul
Sara González Juárez

Escrito y verificado por la psicóloga Sara González Juárez.

Última actualización: 03 enero, 2023

Estos coraciformes son conocidos por exhibir colores vivos en lugares apagados. Hablamos de la familia Meropidae, y concretamente del abejaruco cabeciazul. El azul eléctrico de su cabeza y su pecho lo hace inconfundible a ojos de cualquiera que sepa algo sobre aves.

Por eso, para que amplíes un poco más tus conocimientos sobre estos preciosos animales, aquí podrás encontrar una ficha completa de la biología del abejaruco cabeciazul. No te pierdas nada, pues se trata de un animal fascinante, bello y con un canto difícil de ignorar. Vamos con ello.

1. Su taxonomía y el origen de su nombre científico

El abejaruco cabeciazul responde al nombre científico de Merops muelleri Este último término, muelleri, se le puso en honor a su descubridor, Johann Wilhelm von Müller, un ornitólogo alemán que se embarcó en una expedición por África para encontrar nuevas especies en el siglo XIX.

Esta ave pertenece al orden de los coraciformes y a la familia Meropidae. En esta última es donde se agrupan los pájaros conocidos popularmente como abejarucos, especializados en comer insectos voladores, especialmente abejas (de ahí el nombre).

Merops muelleri.

2. Habitantes de las selvas húmedas

África Central es la hospedadora de este abejaruco. Se le encuentra en una amplia región que abarca Guinea, Sierra Leona, Liberia, Costa de Marfil, Ghana, Nigeria, Camerún, República Centroafricana, Guinea Ecuatorial, Gabón, República del Congo, República Democrática del Congo y Kenia.

Esta última, Kenia, se incluye en la lista porque la especie se desplazó hasta allí huyendo de la deforestación de la selva ecuatorial.

Se trata de un ave que vive en selvas húmedas y cálidas de esta región, consideradas tropicales y subtropicales. Aquí es donde encuentra abundancia de alimento y refugio entre las pobladas copas de los árboles.

3. El abejaruco cabeciazul, especializado en insectos voladores

Como el resto de los integrantes del grupo de los coraciformes, el abejaruco cabeciazul ha evolucionado para ser capaz de atrapar insectos en pleno vuelo. Suele preferir abejas, pero no hace ascos a las mariposas y a otros insectos, como avispas, abejorros, mosquitos o moscas. 

A diferencia de otras especies, que pasan largos períodos sobrevolando áreas y alimentándose en pleno vuelo, este abejaruco suele regresar a su rama con la presa para comérsela a salvo.

4. Un ave solitaria

No se tienen demasiados datos sobre el etograma de esta ave, por desgracia. Se sabe que es solitaria (salvo en la época de reproducción) y diurna, período en el que desarrolla toda su actividad. Su día suele consistir en posarse en ramas del dosel alto del bosque, esperando a avistar a sus presas.

Cuando localiza un insecto, se lanza a por él a toda velocidad, lo atrapa y vuelve a su posadero para comérselo. De esta manera se encuentra a salvo y puede seguir oteando las copas de los árboles en busca de más alimento.

5. El misterio de la reproducción del abejaruco cabeciazul

Cuando se trata de estudiar la reproducción de esta especie, todo son incógnitas. Se ha inferido, a través de su parecido con otras especies, que su época de cortejo y emparejamiento comienza al final de la época de lluvias, cuando el clima es más apacible y todavía hay abundancia de comida.

Suele ser el macho el que busca a la hembra y trata de convencerla de que se apareen, llevándole insectos como obsequio. Si ella acepta, fabricarán un nido en la parte alta de las copas de los árboles. Allí, se presume, pondrá seis o siete huevos y ambos progenitores participarán en la crianza de los polluelos.

6. En estado de preocupación menor

Esta ave se considera, según la lista roja de la IUCN, como en preocupación menor (LC). Esto es así debido a que no se tienen datos suficientes sobre sus poblaciones, por lo que no se puede estimar a qué ritmo desciende su número. Aun así, está claro que está decreciendo.

7. Enfrentándose a las peores amenazas

Merops muelleri.

Aun con esta escasez de información, no se puede negar que la selva ecuatorial es cada vez más pequeña. El desplazamiento de la especie hasta Kenia sugiere que es capaz de adaptarse, relativamente, a nuevos ambientes, pero también que cada vez tiene menos recursos disponibles.

Por otro lado, son tantas las especies centroafricanas en peligro de extinción que los esfuerzos suelen dedicarse, o bien al ecosistema en sí y a la protección de la tierra, o a otros animales en un estado mucho más crítico. Por tanto, solo queda seguir investigando y luchando para preservar la naturaleza, pues la próxima mala noticia podría ser que el abejaruco cabeciazul es mucho menos abundante de lo que se esperaba. No perdamos nunca las fuerzas cuando se trata de proteger nuestro planeta.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • BirdLife International. 2016. Merops muelleriThe IUCN Red List of Threatened Species 2016: e.T22736507A95136124. https://dx.doi.org/10.2305/IUCN.UK.2016-3.RLTS.T22736507A95136124.en. Accessed on 23 December 2022.
  • Merops muelleri. (s. f.). eBird. Recuperado 23 de diciembre de 2022, de https://ebird.org/ebird/home?siteLanguage=es_ES
  • Kofron, C. P., & Chapman, A. (1995). Deforestation and bird species composition in Liberia, West Africa. Tropical Zoology8(2), 239-256.
  • Burt, D. B. (2004). Plumage‐based phylogenetic analyses of the Merops bee‐eaters. Ibis146(3), 481-492.

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.