Algunas mascotas peligrosas para tener en casa
Aunque criar mascotas exóticas no sea algo nuevo, pues varias personalidades han adoptado a mascotas muy peculiares, no deja de ser una moda muy controvertida. Algunos animales pueden presentar serios problemas de salud y de comportamiento en cautiverio, y convertirse en mascotas peligrosas, así que es muy positivo contar con información acerca de estas especies.
Desde luego, es esencial entender que ningún animal es cruel o malo por naturaleza. Simplemente pueden reaccionar frente a contextos desfavorables, cuando sientan que su territorio es invadido o su bienestar es amenazado. Aunque los animales no son crueles ni violentos, en la práctica pueden generarse riesgo para las personas, ya sea por la fuerza o los mecanismos de defensa de algunas especies.
Además, debemos destacar que no todas las especies se adaptarán a la convivencia con los seres humanos. De hecho, la domesticación del perro ha sido un proceso muy largo durante de varios siglos.
Hay que recordar que los gatos jamás han sido totalmente domesticados, sino que aprendieron a cohabitar pacíficamente con las personas. A continuación, veremos algunas mascotas peligrosas que es mejor no tener en tu hogar.
5 mascotas peligrosas que no deberías adoptar
Serpientes
En el primer puesto de nuestra lista de mascotas peligrosas no podían dejar de figurar las serpientes. Si bien algunas especies son inofensivas y hasta tímidas, existen varias serpientes venenosas o constrictoras que pueden ocasionar graves accidentes.
En España y otros países la tenencia en cautiverio de diversas especies de serpientes está prohibida y genera sanciones. Por ello, antes de sumarse a la moda de tener este exótico reptil como mascota, recuerda consultar la legislación competente de tu país.
Felinos salvajes
Quizá en la actualidad parezca insensato tener un tigre o un leopardo como mascota, pero a muchas personas les parece una experiencia atractiva. No está de más recordar que los felinos salvajes difícilmente se adaptarán al estilo de vida de las personas, aunque estén bien adiestrados.
Hiena
También a algunas personas les ha parecido una idea innovadora adoptar a una hiena. Por más curiosa que nos pueda parecer, la hiena es una de las mascotas peligrosas; podría generar numerosos accidentes domésticos, y es que se trata de una especie muy revoltosa y con una poderosa mordida.
Camellos
En el mundo occidental, encontrarse con camellos no es algo muy habitual. No obstante, en muchos países los camellos son animales utilizados para diversas actividades e incluso han sido adoptados como mascotas.
A pesar de su apariencia calmada, el camello muestra una notable personalidad; además, su contextura física le permite tener mucha fuerza. Cuando es expuesto a ambientes desfavorables o estímulos extraños pueden mostrarse agresivos y provocar serias lesiones o traumas. Por ello, lo mejor es dejarlo tranquilo en su hábitat natural.
Osos
Probablemente, muchos de nosotros ya hemos visto videos increíbles de personas que han logrado domesticar osos y conviven con ellos. Estas imágenes son hermosas, pero recordemos que se trata de un animal salvaje, gigante, territorial, con mucha fuerza y dientes poderosos.
Hay gustos muy curiosos a la hora de tener una mascota exótica y diferente en casa. No olvidemos que, a pesar de su inteligencia e innegable belleza, los osos también pueden ser mascotas peligrosas.
¿Por qué no deberías tener un animal exótico como mascota?
Hay muchas diferencias entre los animales salvajes y los de compañía, en relación a su organismo y comportamiento. Al adoptar a una mascota, resulta esencial comprender sus necesidades y conocer su capacidad de adaptación a nuestro estilo de vida.
Muchos animales pueden llegar a ser mascotas peligrosas no por su propia naturaleza, sino por vivir en un entorno que les genera inseguridad, miedo o estrés. Hasta especies amigables, como los monos titi, pueden presentar conductas agresivas cuando son obligados a dejar su hábitat natural.
Además, debemos mencionar que muchos animales exóticos han sido retirados forzosamente de su hábitat natural; son alejados de sus semejantes para ser comercializados como mascotas. Por ello, al adquirir una mascota exótica podemos contribuir indirectamente a la caza furtiva y el desequilibrio de los ecosistemas de nuestro planeta.
Recordemos que el tráfico ilegal de especies exóticas aún existe y sigue sometiendo a estos animales a crueles condiciones de vida. Por todo ello, el mejor consejo es no criar animales salvajes como mascotas; lo mejor es preferir especies que disfrutan nuestra compañía.