Adorable historia del canino que envejeció junto a su dueña
Una compañía fiel fue lo significó este canino que envejeció poco a poco al lado de su dueña. Su amistad ha sido lo suficientemente fuerte para vencer las tormentas y la hostilidad del paso del tiempo. Una historia que ocurre en México, digna de contar al mundo.
Quédate hasta el final para conocer la gran amistad.
Así alegró vidas el canino que envejeció al lado de su compañera
Por supuesto que nadie imaginaba que este vínculo llegara a tal punto que el canino que envejeció con su dueña, pasara hasta el último de sus días a su lado. Sin embargo, todos se sintieron muy felices de ser testigos de una amistad tan profunda y especial.
El perrito llegó a la vida de esta mujer cuando se encontraba llena de vitalidad. Pasó muy poco tiempo para que ambos se sintieran muy felices en compañía del otro y cuando lo descubrieron, se habían elegido mutuamente para acompañarse el resto de la vida.
Con frecuencia, el perrito mostraba un lado muy protector hacia su dueña. Constantemente estaba revisando que ella estuviera bien, por eso no se le despegaba y permanecía a su lado.
La historia de una amistad inquebrantable
La fotografía que verás a continuación, evidencia que ni el tiempo pudo romper el lazo genuino que nació de esta dueña con su perrito. En la primera foto figura la dueña en compañía del perrito poco tiempo después de su llegada, mientras que en la segunda, se ubican en la misma posición, pero esta vez, 18 años después.
Este perrito fue la prueba más contundente de lo que significa ser un amigo incondicional. Desde que llegó a la vida de esta mujer, no se separó nunca más de ella, aún en las circunstancias más difíciles. Siempre estuvo dispuesto a cuidar de ella y pasó cada día muy cerca.
Te puede interesar: Lo que hay en el corazón de un perro cuando ve a su dueño
Afortunadamente, podemos conocer esta valiosa historia por la hija de la mujer que creó este vínculo con el perrito. Gigi, sabía que una amistad como esta, era de suma importancia y por ello decidió compartirla en las redes sociales.
Una despedida muy sentida
Llegó el momento en el que sus cuerpos físicos se separaron. El primero en partir fue el más fiel de los compañeros. El perrito cruzó el arcoíris no sin antes dejar la más duradera de las huellas en el corazón de su dueña, pero también en todos los que fueron testigos de su gran amistad. Dieciocho años de puro amor y compañía llegaron a su fin.
“Hoy su cuerpo no pudo más y solo me queda agradecerle todos estos 18 años ese gran amor que le dio a mi mami. Descansa en paz mi cachorrito, te amamos toda la familia. Ve, corre y brinca en el cielo de los perritos.” Dijo Gigi.
Sin duda, la partida de este canino que envejeció junto a su dueña nos deja una gran lección sobre la lealtad y la incondicionalidad. Su corazón seguirá vivo en la memoria de todos quienes pudieron sentir parte de ese gran amor.
¡Vuela muy alto, pequeñito!