Actitud de caza en los gatos
El instinto de caza en los gatos domésticos puede suponer un problema para los dueños, sobre todo si la presencia de pequeñas presas en el hogar se ha convertido en un hecho habitual. Comprender dicho comportamiento y adoptar algunas medidas disuasorias puede mejorar la convivencia de ambos.
Frecuentemente, los propietarios de gatos suelen mostrar cierto reparo cuando su mascota trae un animal vivo o muerto en la boca. Sin embargo, antes de reprimirlo es importante conocer el origen de dicha conducta. Sigue leyendo este espacio y conoce más acerca de la actitud de caza en los gatos.
¿Por qué los gatos cazan?
Estos animales, como el resto de felinos, son depredadores que durante miles de años basaron su supervivencia en su instinto de caza. Posteriormente, los humanos aprovecharon dicha habilidad para el control de plagas, de forma que solo sobrevivieron aquellos con mayor éxito cazador y reproductivo.
Por si fuera poco, los gatos están provistos de dientes afilados, garras retráctiles, reflejos increíbles, visión nocturna y una capacidad auditiva impresionante. Todos estos rasgos los convierten en cazadores letales en la naturaleza, pues su cuerpo se encuentra adaptado para atrapar y matar a sus presas.
Aunque los gatos ya no necesitan cazar por necesidad, su instinto aún permanece y es lo que los hace buscar presas. Esto sucede incluso cuando su hambre se encuentra saciada, pues la cacería era un estímulo natural y constante en su vida salvaje. En consecuencia, su propio cuerpo busca encontrarse con estos estímulos para satisfacer sus necesidades ambientales.
En la actualidad, además del gran número de felinos callejeros, el gato doméstico se ha convertido en una mascota usual. Sin embargo, tanto unos como otros son descendientes de buenos cazadores y mantienen en sus genes dicho potencial, independientemente de la comida que reciban.
Patrón de caza en los gatos
La técnica habitual de cacería en los felinos consiste en el acecho sigiloso. Dicha estrategia les funciona gracias a la gran agilidad que poseen y la flexibilidad de su cuerpo. Con ello, son capaces de sorprender a sus presas y atraparlas con un mínimo gasto energético. Cuando estos animales se disponen a cazar suelen seguir una secuencia establecida:
- Localización de la presa. Estando en el entorno doméstico, este paso suele ser complicado, a no ser que se trate de una terraza o jardín. Por ello, suele ocurrir durante las escapadas del animal. Una vez identificada la posible captura, el gato observará cuidadosamente sus movimientos.
- Aproximación. Sin apartar la mirada, el felino se irá acercando a su presa de manera progresiva. Para ello, se mantendrá agachado, con la cabeza estirada y las pupilas dilatadas, mientras camina de la forma más silenciosa posible.
- Captura. Cuando el gato tenga clara la posición adecuada para lograr el éxito de su captura, se abalanzará sobre ella. Después de saltar, se erguirá tensamente y empezará a atacar.
- Final de la presa. Como se ha comentado anteriormente, la caza en los gatos no está ligada a su sensación de saciedad. Este hecho supone que muchas veces la captura sea entendida como un mero juego, de modo que el animal cazado no tiene porqué ser matado. En el caso de los gatos callejeros, la muerte de la presa suele ser más habitual.
¿Por qué el gato caza si recibe alimento en casa?
En la naturaleza, los felinos se comportan de una manera oportunista con sus presas, pues cazan incluso cuando no tienen hambre. Esto se debe a que en la mayoría de las veces no saben cuándo podrán volver a encontrar alimento. Por esta razón, el instinto de cacería del gato no está ligado a su apetito.
A pesar de que el felino doméstico reciba comida de manera constante, su instinto aún le dicta que intente cazar si tiene la oportunidad. El problema es que no matan por necesidad y la mayoría nunca se comerá a su presa, pues su alimento lo tiene en casa. Por lo tanto, genera problemas en la naturaleza al cazar y no aprovechar los recursos. Esta es la razón por la que varios tutores buscan reducir su instinto cazador.
¿Por qué los gatos traen animales muertos?
Es posible que tu gato te traiga como ofrenda un animal muerto y lo deje a tus pies. Como podrás imaginar, este acto es quizá la señal más obvia de que te considera parte de su familia, por lo que te “alimenta” con parte de su botín de cacería. Claro está, no espera que realmente te lo comas, pero es como un pequeño comportamiento ancestral que recuerda parte de su naturaleza salvaje.
Los felinos salvajes alimentan a sus crías por medio de pequeños fragmentos de presas o comida. Esta conducta es una de las pocas que tendrán como familia antes de independizarse, de manera que para los gatos es como un signo de aceptación y profundo cariño hacia su tutor.
¿Por qué a veces el gato juega con su presa?
Es posible observar que un gato “juega” con su presa antes de matarlo, lo cual podría parecer que es una forma de extender su sufrimiento. No obstante, el instinto natural del felino doméstico es el que le obliga a realizar estas acciones. Dicho jugueteo es en realidad un intento de cansar a sus presas antes de propinarles una mordida letal. De esta manera, el gato se asegura de que no reciba daño.
Las presas intentarán por todos sus medios escapar y atacar a su depredador. Por ello, el instinto del gato le indica que debe cansarlo o “jugar” con él para aturdirlo y dejarlo indefenso. Claro está, el felino no siempre saldrá victorioso, pues su éxito también dependerá de su experiencia.
¿Es bueno dejar que un gato cace animales?
Nunca es bueno dejar que tu gato cace otros animales, pues algunos de ellos podrían contagiarle enfermedades peligrosas y riesgosas para su salud. Estas pueden ser desde los simples parásitos intestinales como nemátodos, hasta patologías como la toxoplasmosis, que incluso podría afectar a sus tutores.
De la misma forma, ten en mente que el cazar animales que nunca se van a comer provoca serios impactos en el ecosistema. Podrían ser tan simples como un cambio en las cadenas tróficas, o complejas como la extinción de una especie concreta. Es más, en Australia se tuvo que optar por erradicar a varios gatos abandonados, pues provocaron serios problemas ecológicos y era la única manera de detenerlos.
Reducir el instinto cazador
Aunque el instinto de caza en los gatos no se puede eliminar, sí que hay una serie de medidas que pueden mitigar dicho comportamiento.
La más efectiva se basa en evitar las salidas del felino fuera del hogar, opción que muchos dueños adoptan por otras razones y no tiene por qué resultar perjudicial. Claro está, esto conlleva el mejorar la estimulación ambiental de la mascota y ayudarles a satisfacer sus instintos de manera sana, lo cual se logra por medio de diferentes juegos.
No obstante, para aquellas personas que no quieran privar a su mascota de esta libertad existen otras opciones:
- Aportar alimentos crudos ocasionales, como pollo o sardinas. Esta opción siempre debe ser consultada al veterinario, que ha de comprobar que haya una buena digestibilidad por parte del animal. Además, debe realizarse en momentos puntuales, de forma que el animal encuentre una forma de placer diferente sin volverse dependiente.
- Aumentar las sesiones de juego. La mayoría de los gatos domésticos cazan como modo de entretenimiento, por lo que, cuanto más distraídos estén, menos necesidad de cazar tendrán. Asimismo, pasar más tiempo con el felino aumentará el vínculo entre este y su dueño.
Diversos estudios han demostrado que los collares con cascabeles, como medida disuasoria, pueden reducir la efectividad de su cacería. Por lo tanto, es un método adicional para lograr que otros animales no caigan presa de su instinto.
Al final, es posible que parezca poco inhumano someter al gato a estas pautas para evitar sus propios instintos. Sin embargo, hay que recordar que ya no son animales salvajes que dependen de la naturaleza para sobrevivir. Además, el daño que se le causa a los ecosistemas puede ser muy peligroso, pues desequilibran la estabilidad natural e incluso podrían extinguir especies enteras.
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