6 señales que demuestran que tu gato te quiere
Interpretar a los gatos no es tan sencillo. A diferencia de los perros que expresan su afecto de forma clara, los felinos, sin duda, comunican lo que sienten de forma menos obvia. Pero eso no significa que nuestra mascota no quiera expresar su cariño y lealtad hacia nosotros, solo que lo hace de una manera diferente, que muchas veces hasta es difícil de reconocer.
Si quieres descubrir lo mucho que tu gato se preocupa por ti, echa un vistazo a estas señales que demuestran que para tu gato no eres indiferente y que delatan que tu pequeño amigo te quiere.
Ronroneo y amasado
El ronroneo es el sonido con el que los gatos suelen expresar cariño hacia sus dueños. Pueden ser de gran alcance y bastantes graves. Según investigaciones, cuando los gatos ronronean disminuyen su ritmo cardíaco, lo cual hace que se sientan mucho más relejados.
Cuando los gatos ronronean también demuestran alegría y es una forma de decirte que están felices y seguros con su dueño.
Por lo general, seguramente sientas que tu gato emite estos sonidos cuando se posa en tu falda o cuando siente tu mano sobre su cabeza. Para ellos, ese momento es de relajación y disfrute.
El ronroneo suele ir acompañado de otra forma de expresar cariño que se llama amasado. El amasado es cuando los gatos se sientan sobre tus piernas y comienzan a mover sus patitas haciendo un movimiento similar al del amasado.
Cuando los felinos hacen ese movimiento, observarás que además de ronronear y cerrar un poco sus ojos, suelen dejar a la luz sus afiladas uñas. Pero esto no lo hacen para demostrar agresividad, sino todo lo contrario, es para expresar todo el cariño que sienten hacia ti. De hecho el movimiento de patas es tan sutil que no llegas a sentir sus puntillosas uñas.
Mucho se ha hablado sobre cuál es el origen del amasado que suelen hacer los gatos, pues este movimiento se origina durante los primeros días de su vida. Cuando son amamantados por su madre, los pequeños por instinto mueven sus patitas presionando las tetillas de su progenitora, de esa manera pueden extraer mayor cantidad de leche. Con el paso del tiempo, ese recuerdo agradable lo vuelen a reiterar cada vez que se sienten felices.
Cabezazo y lamidas
Si una persona te cabeceara para demostrar afecto, seguramente tu reacción sería quizás de sorpresa o agresiva. Sin embargo, en los felinos, el cabezazo es señal de cariño. Cuando lo hacen depositan sus feromonas faciales en ti, demostrándote toda su confianza y seguridad.
Seguramente combinen sus cabezazos con algunas lamidas en tus manos o una que otra pequeña mordida. Si es así siéntete de feliz, ya que tu gato te está expresando que ya eres parte de su círculo amistoso.
Cola contraída
La cola de un gato dice mucho. Cuando se infla es señal que tu felino está asustado, en cambio cuando su punta se contrae significa que siente felicidad. Frecuentemente ese movimiento lo hacen cuando se encuentran muy cerca de sus dueños.
Panza hacia arriba
¿Has notado que los gatos a veces ruedan sobre el suelo? Cuando tu gato hace este tipo de movimiento es que quiere llamar tu atención. Los felinos sólo muestran su panza a quiénes le emiten confianza, así que si eres uno de ellos disfruta ese momento ya que tu mascota se sienta amada y protegida.
Hora de la siesta
Como saben los gatos duermen la mayor parte del día y suelen buscar lugares cálidos para dormir. Por lo tanto no es de extrañar que al momento de la siesta o por la noche, salte hacia tu regazo. Debes sentirte honrado ya que cuando los gatos duermen son mucho más vulnerables, entonces que te elijan a ti como un lugar seguro para pernoctar es un verdadero elogio.
Un regalo muy especial
Finalmente, seguramente más de una vez has observado el comportamiento de tu gato cuando ve un ave, un roedor o un insecto. Sus pupilas se dilatan, suele provocar uno que otro sonido y su posición de ataque es inimitable. El instinto cazador lo lleva a cazar su presa y jugar con ella hasta matarla. Pero esto no es todo. Luego se la llevará a su dueño, ya que quiere compartir con él su trofeo. Entonces que no te extrañe si vez sobre tu cama o tu sillón favorito un ave o insecto muerto, tu felino lo ha llevado allí en señal de generosidad y amistad.