11 maneras de darle medicina a tu perro sin que lo note

Muchos dueños se preguntan cómo darle medicamentos a su perro de manera efectiva y sin que lo note. Toma nota de estos sencillos métodos.
11 maneras de darle medicina a tu perro sin que lo note

Escrito por Yamila

Última actualización: 26 julio, 2022

Los medicamentos de uso común en el mundo veterinario se pueden administrar por varias vías: inyectable, tópica (directamente sobre la piel), en gotas, en pastillas o en polvos de libre aplicación. De todas maneras, los fármacos que recetan los veterinarios para los perros enfermos casi siempre vienen en forma de tabletas bastante evidentes a la vista.

Darle medicina a tu perro es uno de los desafíos más grandes que tienes como dueño. Los canes son animales muy inteligentes que saben cuándo los queremos ‘engañar’ y no van a ponernos las cosas fáciles a la hora de ingerir algo que no sea de su agrado. En el siguiente artículo te daremos algunos trucos para que esta tarea no sea imposible.

¿Cómo darle medicina a tu perro y superar la prueba?

Ya sea una pastilla o un jarabe, darle medicina a tu perro puede ser una misión complicada. Pero siempre es necesario suministrarle los medicamentos que le haya prescrito el veterinario, aunque te lleve todo el día. Muchos dueños se preguntan cuál es el mejor método para cumplir con las tomas y que la mascota complete el tratamiento. Aquí te damos algunos trucos.

1. Oculta tus intenciones (mantén la calma)

Como primera medida, te recomendamos que estés relajado al momento de darle la medicina a tu perro, porque si estás estresado o intranquilo, el animal pensará que hay un peligro cerca y será muy difícil darle el medicamento. En cambio, si te acercas a él como ‘si nada sucediese’, casi no se dará cuenta de lo que está ocurriendo.

Se ha demostrado en múltiples investigaciones que los perros no solo son capaces de sentir empatía, sino que también actúan de acuerdo a las emociones que muestre el tutor. Si tú no actúas con miedo al ofrecerle un medicamento a tu can, es mucho más probable que él tampoco tema.

2. Dale órdenes sencillas antes de darle la medicina

Es posible que tanto tú como tu mascota se encuentren tensos y nerviosos, así que puedes intentar jugar con él o darle órdenes sencillas antes de administrar el medicamento. Con esto, ambos se tranquilizarán y el can estará menos renuente.

Al finalizar, también es recomendable darle un premio o felicitarlo para que asocie el medicamento con algo positivo. De esta manera, creas en su mente un nuevo hábito que hará más sencillo administrarle cualquier fármaco en el futuro.

3. Método de la jeringa para jarabes

Algunos veterinarios recomiendan los jarabes en casos muy puntuales, como por ejemplo si el animal no tiene dientes, está muy débil o el dueño afirma que no hay manera de que se trague una pastilla. En contadas ocasiones, el fármaco que se ofrece solo está disponible en formato líquido.

Por desgracia, este escenario no quiere decir que darle un jarabe o líquido a un perro sea ‘pan comido’, porque también tiene sus desafíos. Para lograrlo, necesitas una jeringa (solo la parte plástica, sin aguja), donde colocarás la dosis de medicamento.

Luego, te acercas al perro lentamente, sujetas su hocico con una mano y con la otra introduces la jeringa por uno de los laterales de la mandíbula. Empuja rápidamente el émbolo para que salga el líquido y mantén la presión en el hocico hasta que te asegures de que el can lo haya tragado todo. Al terminar, quédate a su lado y hazle caricias de recompensa por haberse portado bien.

Asegúrate de que el líquido no resbala por la comisura de los labios de tu perro. 

4. Método del escondite

Mi perro protege su comida

Pasemos ahora a trucos para que puedas darle medicina a tu perro si esta es una pastilla (sin importar el tamaño). Una buena manera de engañarlo es esconder el medicamento en alguna comida que le guste, como puede ser yogur, pienso húmedo, cocido de arroz, crema de maní o un trozo de carne picada.

Muchos dueños optan por colocar la pastilla dentro de un pedazo de queso o de una salchicha para que el animal lo trague sin masticar y no escupa el medicamento. En algunos casos, también se puede mezclar directamente con el pienso, sobre todo si el can come muy de prisa, como sucede con las razas Labrador o el Carlino.

Se recomienda utilizar alimentos que el can trague directamente sin masticar. De lo contrario, podría darse cuenta del “engaño” al morder la pastilla y escupir la mezcla.

5. Método de machacar la pastilla

Si lo anterior no funciona, entonces debes tomarte el trabajo de pulverizar la pastilla y mezclarla con alguna comida de consistencia cremosa. Ten en cuenta que algunos medicamentos son demasiado amargos cuando se machacan y que ese sabor ‘inundará’ los alimentos. Por ello, es probable que el perro no quiera comer nada de lo que hay en su plato en las primeras ocasiones.

6. Método de ‘la comida en el suelo’

Esta técnica para darle medicina a los perros no es la más efectiva de todas, pero puede resultar en algunos casos. Se trata de hacerle creer al animal que está disfrutando de una comida ‘de personas’ en vez de una pastilla.

Para llevar la técnica a cabo, primero deberás estar almorzando o cenando tú. Haz como que no te das cuenta y deja caer un trozo pequeño de comida de tu plato (por ejemplo, algo de pollo, carne, etc.). Una vez que el perro lo coma, repite con la pastilla. La clave reside en no quedarse mirándolo, sino en continuar con tu rutina como si nada sucediese.

7. Método de introducir la pastilla

Esta es una opción que se indica en última instancia y cuando nuestro perro es bastante dócil. Ponte al lado del can y abre su mandíbula con una mano. Coloca el medicamento en el interior de la boca, lo más cerca posible de la garganta.

Cierra sus mandíbulas con cuidado y mantén la presión hasta que notes que haya tragado la pastilla. Para asegurarte de que pasa sin problemas, frota la garganta hacia abajo. La calma y la paciencia son fundamentales para que puedas darle medicina a tu perro sin que lo note y este método es algo arriesgado si tiene problemas de comportamiento.

8. Método de la competición

Esta estrategia solo se puede llevar a cabo si tienes más de un perro en casa, si la patología que padece el paciente es leve y si ambos no son nada agresivos entre ellos. La premisa es sencilla: juega con cada uno de ellos y ofréceles un premio cuando lleven a cabo cierto comando, como saltar, dar la pata o tumbarse.

Cuando te toque recompensar al perro enfermo por su acción, mete la pastilla o el polvo en la chuchería de recompensa. La mayoría de los canes estarán más enfrascados en la actividad de competición que en el sabor del premio, así que aceptarán sin problema el fármaco.

Además, este método te ayudará para educar a tus canes y estimularlos aún cuando están un poco débiles de salud.

9. Método con cápsulas de gelatina vacías

La mayoría de los medicamentos en forma de pastilla tienen un sabor amargo que es fácil de detectar para los perros. Sin embargo, es posible enmascarar el sabor si se coloca la pastilla dentro de cápsulas de gelatina vacías. Estas cápsulas son las mismas que se utilizan en otros fármacos, de manera que no conllevan un riesgo para la salud del can.

10. Método de la gasa (cremas de aplicación tópica)

Este truco está dirigido en específico para los fármacos que se apliquen de manera directa en la piel. En estos casos, se busca evitar que los perros laman la zona afectada, por lo cual se tiende a recurrir al uso del collar isabelino. A pesar de ello, existe una forma alternativa que evita la molestia de este collar, la cual consiste en cubrir la zona con una gasa y fijarla con vendajes o cintas autoadhesivas especiales para mascotas.

Con esto se evita que el can pase por la molestia de llevar un collar isabelino. Claro está, a los perros tampoco les gusta sentir objetos extraños en su cuerpo, así que es importante mantener vigilado al can para corroborar que no muerda la gasa. De lo contrario, no habrá más remedio que ponerle el collar.

11. Método de las chucherías diseñadas

Aunque parezca extraño, cada vez son más las marcas que se aventuran a fabricar chucherías para perros con un hueco específico para pastillas. Estas tienen un sabor delicioso y una forma perfecta para que la medicina quede oculta a los sentidos del can. En inglés se conocen como pill-pocketspero también se comercializan en países de habla hispana.

Premio para perros: comida

Como ves, son muchas las maneras que existen para darle medicina a tu perro sin que se percate de ello. De todas maneras, si ninguna de ellas funciona o notas que tu can se pone demasiado agresivo, te recomendamos que acudas a un profesional veterinario. Por mucho que quieras a tu mascota, a veces la mejor opción es dejar que los profesionales se ocupen de las tareas más delicadas.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Cota, S. del C. (2007). Enfermedades endocrinas de perros y gatos. Diplomado de medicina y cirugía en perros y gatos Facultad de medicina veterana y zootecnia UAS MC.
  • Empathetic dogs lend a helping paw, Science Daily. Recogido a 10 de noviembre en https://www.sciencedaily.com/releases/2018/07/180724105921.htm

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.