Los gatos y el sexo, la fuerza de la naturaleza

Los gatos y el sexo, la fuerza de la naturaleza

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 08 diciembre, 2017

De todos es sabido la energía y la fuerza sexual que tienen los gatos, muchas personas no se deciden adoptar un felino como mascota, precisamente por esta situación. Para los gatos el tema sexual no es sólo para cumplir la función de reproducción, sino que también es una cuestión de formar vínculos afectivos y una posición social.

El sexo en los gatos es diferente en los machos que en las hembras, ambos tienen los periodos de celo en diferentes épocas del año, también el comportamiento es diferente. Si quieres saber más acerca de los gatos y el sexo, te lo explicamos a continuación.

Edad de reproducción de los gatos

La edad de reproducción de los gatos comienza relativamente pronto, en el caso de los machos comienza su madurez sexual entre los 8 y 12 meses, terminando su ciclo reproductivo a los 7 años de edad aproximadamente. En el caso de las gatas, comienza más temprano todavía, se puede dar el caso que desde los 7 meses esté apta para reproducirse, terminando su ciclo de reproducción a los 8 años.

Aunque habría que evitar que la gata se quede embarazada antes de los 10 meses de edad, puesto que no estaría lo suficientemente madura.

La frecuencia del celo de las gatas puede variar dependiendo de las razas, también de la propia naturaleza de ella. La época donde los felinos tienen mayor actividad sexual es en los meses de primavera, aunque pueden tenerla en cualquier mes del año.

El celo de las gatas

gatos y el sexo

 

El celo de las gatas tiene unas características diferentes al resto de los animales. En el ciclo las hembras no eliminan sangre, pero en su lugar marcan todo el territorio con su orina, además hay cambios en su forma de actuar, ya que se vuelve más mimosa y a veces hasta puede perder el apetito.

El periodo de celo podemos dividirlo en tres fases:

El precelo o proestro

Esta primera fase del celo puede tener una duración de 1 a 3 días, aquí notarás un cambio de carácter de la gata, necesitará cariño todo el día, perderá un poco el apetito y realizará algunos maullidos. También experimentará un cambio en sus órganos sexuales, ya que se están preparando para el apareamiento. Aunque en esta fase todavía no se va a dejar montar.

El celo o estro de la gata

El celo comienza unos días después del precelo, aquí la gata ya está receptiva para que se produzca el apareamiento. En esta etapa hay un cambio más brusco en su conducta y los maullidos son más fuertes y se producen con más frecuencia. Si no se produce el apareamiento lloran todo el tiempo a la vez que maullan, se ponen inquietas y se frotan con el suelo. Hay que tener un especial cuidado y vigilarlas, ya que van a querer salir de casa en busca de un macho que la monte. Si consigue aparearse, el celo le durará entre 4 y 6 días, si no se produce puede durar hasta 14 días.

El declive sexual

Cuando ya termina la etapa del celo, la gata se relaja hasta que comience el próximo ciclo reproductivo.

El celo en el gato macho

gatos y el sexo 3

El celo en los machos actúa de diferente manera. Desde que el gato alcanza su madurez sexual, está listo para aparearse casi todos los días del año. Él no presenta ciclos de celo como les pasa a las hembras. Los síntomas que presentan los gatos en su época de celo, es que dejan su orina por toda parte, además tiene un olor muy fuerte que no desaparece con nada.

Además gime y maulla todo el día con unos gritos insoportables. Se vuelven muy inquietos y se mueven de un sitio para otro, se frotan con todos los objetos que encuentran a su alcance y dejan su marca por todas partes.

Si un gato macho se da cuenta que hay una gata en celo dispuesta a ser apareada, el macho va a hacer lo que sea por conseguirla, incluso pelearse con otro macho que esté cerca. Hay que estar muy pendiente de él, ya que si no encuentra una gata en celo cerca, lo más probable es que se escape y no vuelva hasta que no consiga aparearse.


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