La importancia de la correa en el perro

La importancia de la correa en el perro

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 08 febrero, 2022

Seguramente el primer objeto que compraste para tu perro fue una correa. Los dueños de mascotas adquieren este artículo con gran entusiasmo. Pero los animales no reciben con tanta animosidad ese tipo de compra y sin lugar a duda, ya te lo harán notar. Por eso es muy importante que el producto que escojas sea el más adecuado y que responda a las necesidades de tu pequeño amigo. Para lograrlo a continuación compartimos algunos consejos que pueden ser de gran ayuda.

La correa en el perro

cachorro de paseo

Comprar la correa de una mascota es uno de los momentos más esperados cuando tienes un nuevo integrante en casa. Para conseguirla te diriges a la tienda de mascotas y una vez allí seguramente te quedas alucinado por la gran variedad de modelos que tienes a tu alcance; que más larga, qué más corta, con figuras, de cuero, tipo cadena.

Entras a ver y a tocar una y otra opción hasta que pierdes sentido del tiempo. Después de pasar en la tienda varios minutos, puede ocurrir que la mirada de algún vendedor comience a intimidarte, tratas de acelerar la decisión y seguramente terminas escogiendo el primer modelo que viste.

Pero no importa si perdiste tiempo, lo importante es que has elegido la correa para tu pequeño amigo y seguramente cuando llegues a casa se la mostrarás con gran alegría, se la colocarás y abrirás sin más la puerta para salir a pasear.

Ya en la calle, tras algunos minutos de caminata, notas que el paseo no ha sido lo que esperabas. Tu perro se detiene, no te hace caso y la aventura que pensabas disfrutar comienza a desmoronarse. Sin más decides regresar a casa, con una gran frustración.

Ya en tu departamento le sacas la correa a tu animal y te pones a pensar en qué has fallado, ya que existe una gran lejanía entre las expectativas humanas y las caninas.

Esa distancia muchas veces, pueden conducir a la frustración y quizás a deteriorar la relación con tu mascota. Pero no tiene por qué ser así.

La buena noticia es que es posible que tu perro aprenda a entender que la correa es un elemento que necesita para salir a pasear. Con el tiempo, probablemente no lo vea como un objeto amenazante, sino como un artículo con el que puede desarrollar cierta empatía. Pero para que eso suceda es necesario un entrenamiento adecuado.

¿Cómo escoger y comenzar a utilizar una correa canina?

perro para television 2

Escoger el collar y la correa en los perros no es una elección menor. Requieren de cierta personalización y existen ciertos factores que debes tener en cuenta como la raza, el tamaño y la edad. Primero debes comenzar escogiendo un collar adecuado. Un buen ajuste marca toda la diferencia. Si notas que tu perro está irritado, coloca el collar de a poco hasta que logre acostumbrarse. Te darás cuenta del cambio de actitud, ya que observarás que él centra su atención en otra cosa.

Cuando tu perro ya se ha aclimatado al collar es hora de que coloques su correa. Lo mejor es que comiences a usarla dentro de tu casa. Un buen ejercicio es que tu mascota la vaya arrastrando sin que nadie la manipule o tire de ella. Esta actividad sólo debe hacerse bajo la supervisión directa de un adulto, ya que la correa podría enredarse en algo y podría ser muy peligroso para tu perro. Y recuerda que la correa que escojas no debe pesar demasiado, debe ser de un material ligero.

El siguiente paso es introducir la correa durante una caminata. Los primeros paseos deben ser algo breves. Evita ir tirando de la correa, procura ser suave. Con el tiempo notarás que tu perro va progresando y es allí donde debes recompensar su gran comportamiento. Puedes hacerlo diciendo gran variedad de elogios o dándole alguna de sus galletas favoritas.

Ármate de mucha paciencia y no lo olvides: la correa no tiene que ser un dispositivo de dirección sino que tiene que ser una verdadera herramienta de comunicación entre tú y tu perro.
En caso de que no funcione y no obtengas resultados positivos, no continúes. En ese sentido, lo mejor es que recurras a la ayuda de un profesional. Un entrenador calificado, en esos casos, sin duda, puede ser una muy buen opción.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.