El momento de la despedida de nuestra mascota
Una mascota no es solo un animal, si no que con el tiempo, se convierte en un miembro más de la familia. Sobre todo con los perros y los gatos, pero también con loros y otros animales. La complicidad llega a ser tal, que sabemos lo que quieren con solo mirarlos. Por eso, las mascotas se convierten en un ser querido más, y cuando tienen que dejarnos, se produce una situación de duelo parecida a la de la pérdida de un familiar. Para que esta situación no se haga tan dolorosa, debemos prepararnos para el momento de la despedida de nuestro pequeño amigo.
¿Cómo podemos prepararnos para la despedida de nuestra mascota?
Estar preparados no significa temer cada segundo que nuestra mascota vaya a desaparecer de un momento a otro de la faz de la tierra, simplemente significa que ciertos animales (sobre todo los perros y los gatos) viven menos que los humanos y que debemos disfrutar de ese tiempo al máximo.
La pérdida de la mascota debe en todo momento, asumirse como algo natural y que forma parte del ciclo vital. Algo fundamental de esta preparación es desechar los sentimientos de culpabilidad que suelen aparecer en los últimos momentos de vida de un animal doméstico, al pensar que no se ha hecho lo suficiente por ella o que no se le ha prestado la debida atención. Estos pensamientos solo aumentan la tristeza y además son completamente falsos.
¿Cuáles son las señales que indican la cercanía de la muerte en mi mascota?
Como pasa con cualquier enfermedad, existen signos en nuestros animales que indican que su fallecimiento se acerca. El reconocerlos es un modo de prepararse para despedirse de nuestro pequeño amigo.
Normalmente cuanto más ancianas son las mascotas, menos apetito tienen. Además, su actividad disminuye, sus jadeos se incrementan y no es raro que aparezca algún tipo de cojera. También pueden aparecerles canas (pelos grises) concentradas de forma especial en la zona de la cara. Las encías pierden el color rosado de su juventud.
¿Qué pasa si hay niños pequeños en la familia?
Este tipo de situaciones afectan especialmente a los niños, por lo que se les debe prestar mucha atención en estos momentos. Muy probablemente, la pérdida de su mascota será la primera experiencia dolorosa que tengan y es recomendable hablar con ellos del tema abiertamente y haciéndoles ver que todos estamos tristes y echaremos de menos al animal.
Sobre todo hay que hacerle ver que estos sentimientos son completamente normales. Además, no es recomendable en ningún caso ocultar la muerte tras historias de que se ha ido de vacaciones, a una granja o que se ha escapado, porque esto solo le dará al niño esperanzas de que su animal pueda volver y no le ayudarán a superar la pérdida.
¿Es aconsejable la eutanasia animal?
Las causas de muerte de animales domésticos suelen ser accidente, enfermedad y vejez. En el primero de los casos no puede hacerse nada, pero en los otros, puede llegar a plantearse la opción de la eutanasia. Ésta es una decisión que debe tomarse con ayuda del veterinario y cuando el animal esté ya muy enfermo, no coma, no duerma, no se mueva apenas y tenga dolores muy intensos. El proceso se practica bajo la supervisión de un veterinario, quien garantiza que el proceso es totalmente indoloro para nuestra mascota. Antes de dormirle para siempre, es muy recomendable que el dueño permanezca junto a su mascota para tranquilizarle y que se muestre tranquilo y alegre, puesto que el fiel compañero percibe perfectamente las emociones de su amo.
¿Cómo se superan los primeros días sin la mascota?
Según los psicólogos, el duelo que se sigue tras la pérdida de una mascota sigue las mismas pautas que el duelo que produce la muerte de un ser querido. La primera fase es la desolación. El dueño no se cree que su querido animal ya no esté a su lado y puede invadirle una sensación de culpabilidad de no haber actuado correctamente.
Sin embargo, el tiempo todo lo cura y poco a poco los recuerdos de los buenos momentos superarán el recuerdo de la muerte. Cada persona es un mundo y vive este proceso de forma distinta. Sin embargo, no es recomendable adquirir otro animal inmediatamente después, puesto que solo conseguirás compararle con el anterior.